El proyecto “Apadrina una Encina”

Los beneficios de apadrinar un árbol y en especial de apadrinar encinas en nuestra región, supone un enlace duradero entre nuestra especie y la naturaleza, centrándonos en la idea de la necesidad que tenemos de conservar la naturaleza para poder así luchar contra el cambio climático, la desertización y otros problemas ambientales que se aproximan, si no están aquí ya, de forma peligrosa.

Sin lugar a dudas, la participación de la Ciudadanía es fundamental para la conservación y mejora de nuestro entorno además de desarrollar el sentido de responsabilidad y compromiso, y por esto, puesto que la mayoría de los habitantes de nuestra Autonomía residen fuera de los grandes núcleos urbanos, es a ellos a los que hay que dirigirse primeramente para posteriormente, mediante otros canales de comunicación, se extienda el mensaje de apadrinamiento, no ya sólo en nuestra Comunidad si no también fuera de ella.

Hay que considerar también la idea que se está implantando lentamente en nuestra sociedad relacionada con el desarrollo sostenible y la responsabilidad social corporativa: el cuidado del medioambiente se extiende entre todos los niveles de la sociedad y los ayuntamientos locales no quedan fuera de este ámbito.

Para finalizar, hay una tercera vertiente muy importante para nuestra región y es el turismo, especialmente el turismo relacionado con la naturaleza. Extremadura se ha caracterizado por ser un territorio ambientalmente muy saludable que atrae cada año a miles de visitantes que vienen a ver aves, a pasar tiempo en el campo, y que admiran nuestra naturaleza.

Extremadura y la economía verde en el Horizonte 2030

Los retos mundiales que justifican la puesta en marcha de una estrategia de economía verde y circular para Extremadura son:

Actividades del proyecto

Desde Unión Extremeña del Olivar (UNOLIVAR), entidad encargada de la ejecución del programa, le proponemos poner en marcha en su localidad la idea del apadrinamiento de encinas, aunando tres actuaciones.

Apadrinar un árbol, una encina en nuestro caso, cuando se produzca el nacimiento de un niño/a en la localidad, con un documento indicando el nombre del niño o niña.

Apadrinar una encina, con motivo de otros hechos relevantes para la persona, como un enlace matrimonial, constituyendo así la encina un lugar donde recordar a los seres queridos y los hechos felices. O apadrinar una encina solamente por amor a la naturaleza, por cuidar el medio y preocuparse por el ecosistema.

Por otra parte, sería posible que los alumnos de los centros de primaria realizaran una actividad en donde podrían apadrinar un conjunto de encinas en una zona previamente demarcada por el propio ayuntamiento. En este caso, el apadrinamiento (el cuidado de los árboles) será del centro educativo.